Las puedes acariciar, besar, succionar los lóbulos, soplarlas suavemente, deslizar la lengua dentro… (Fíjate en su reacción ya que no a todo el mundo le gusta).
La boca y los labios
¡Son muy importantes en las relaciones sexuales! Hay muchas maneras de besar. Podéis descubrir juntos lo que os gusta. Usad los labios, la lengua y los dientes (¡con cuidado!) para explorar vuestros cuerpos mutuamente.
El pecho y los pezones
Muchos chicos tienen el pecho y los pezones muy sensibles. Acaríciale debajo de las axilas y continúa el movimiento hasta la areola (la piel más oscura alrededor del pezón) y el pezón. Puedes acariciar sus pezones de muchas maneras: con los dedos, los labios o la lengua; suavemente o con firmeza.
Acaríciale suavemente desde el bíceps y hacia la cara
interior del brazo y codo: ¡a la mayoría de la gente le encanta!
La nuca y la parte posterior de la cabeza
La parte posterior de la cabeza y sobre todo la nuca son muy
sensibles. Bésalas o acarícialas o desliza los dedos por sus cabellos.
La espalda
La espalda es una zona muy grande y sensible. Acaríciala
suavemente con las yemas de los dedos o con las uñas, masajéala con firmeza o
recórrela con tus dedos de arriba abajo. No te olvides de los costados: sigue
la línea que va desde sus axilas hasta sus caderas.
El ombligo y la tripa
La tripa o abdomen está plagado de puntos sensibles.
Acaríciale o bésale con suavidad en un movimiento descendiente sobre su abdomen
(esto puede ser particularmente excitante ya que conduce al pene).
Las manos
Obviamente, hay muchas cosas que puedes hacer con ellas. Las
puedes usar para tocar y acariciar a tu pareja, o para explorar tu propio
cuerpo y proporcionarte placer a ti mismo/a. Pero también es muy agradable
acariciar las manos de tu pareja. Las palmas son especialmente sensibles.
Las nalgas y el ano
Las nalgas al igual que el ano son puntos muy sensibles.
Acaricia, masajea o pellizca sus nalgas y descubre lo que le gusta. Seguramente
el ano no es la primera parte del cuerpo en la que piensas cuando vas a
acariciar a alguien, pero es muy sensible y a muchos chicos les gusta que se lo
toquen cuando hacen el amor. ¡Por supuesto, es muy importante que se lo laven
bien antes! El área entre el ano y los testículos, el periné, puede producir
también una sensación muy agradable – lo puedes acariciar o presionarlo
suavemente.
A algunos chicos les gusta que les introduzcas un dedo
dentro del ano. Procura humedecerlo siempre con saliva o con lubricante. La
primera vez que lo tocas, el ano se contrae y se cierra –es un acto reflejo.
Mantén un dedo dentro durante un momento para poder continuar. Si no te gusta
la idea de meterle un dedo en el ano a otra persona, trata de darte una ducha
con ella antes de hacer el amor, de manera que los dos estéis limpios y frescos
por todas partes.
Cuando introduces un dedo en el ano de un chico, puedes
sentir la próstata, la cual es una parte muy sensible. Se encuentra a unos
cinco centímetros en el interior del ano, en el lado del abdomen. La puedes
tocar y presionar con el dedo –¡ a algunos chicos les proporciona una sensación
maravillosa! A algunas personas les encanta incluir el ano en sus relaciones
sexuales. Pero si a ti no te gusta, ¡dilo! No tiene por qué gustarte todo.
Experimenta todo lo que quieras, pero no hagas nada con lo que no te sientas a
gusto.
No es doloroso que te introduzcan un dedo o el pene en el
ano si se hace de la manera adecuada y con tranquilidad. Utiliza siempre una
gran cantidad de lubricante y un condón. ¿Es agradable? ¿Quieres continuar?
Sigue tus instintos y sentimientos. Déjalo si no te resulta agradable. Nunca
presiones a nadie para que tenga sexo anal si no les entusiasma la idea.
La parte interior de los muslos
Esta zona es especialmente sensible y puede ser muy
excitante al tacto ya que conduce al pene y los testículos. La puedes acariciar
con los dedos, besarla o lamerla.
Los pies
La planta de los pies es muy sensible (¡y te puede producir
muchas cosquillas!). Puede ser muy agradable que te den un masaje en los pies,
pero tienes que estar relajado.
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