VIH son las siglas del virus de la inmunodeficiencia humana, que causa el SIDA. SIDA es el acrónimo del síndrome de inmunodeficiencia adquirida.
Hay 34 millones de personas en todo el mundo que tienen VIH/SIDA. Es una ETS que destruye el sistema inmunitario. Con el tiempo, el VIH ha dañado tanto el sistema inmunitario que el organismo no es capaz de luchar contra otras infecciones. El SIDA se desarrolla solamente en las etapas finales de la infección de VIH.
Se dice que una persona es VIH positiva (VIH+), seropositiva o que vive con el VIH/SIDA cuando está infectada con el VIH.
El VIH es una enfermedad incurable. No obstante, existen tratamientos para frenar el progreso de la enfermedad y el desarrollo del SIDA.
Actualmente, una persona con VIH puede vivir hasta 20 años sin desarrollar el SIDA.
Imagen: el lazo rojo es un símbolo de solidaridad con la gente que tiene VIH y con los que viven con SIDA.
¿Cómo se contagia el VIH?
Se puede contagiar a través de fluidos corporales infectados tales como el líquido pre seminal, el semen, el flujo vaginal, la leche materna y la sangre.
El VIH se propaga a través de la práctica de actividades sexuales pero también no sexuales.
Entre las actividades sexuales se encuentran el tener relaciones sexuales vaginales, anales u orales sin protección. El sexo vaginal y el sexo anal conllevan mucho más riesgo de contagio que el sexo oral.
Entre las actividades no sexuales se encuentran el compartir agujas hipodérmicas no esterilizadas, recibir transfusiones de sangre contaminada y la lactancia. La madre, además, puede pasárselo al bebé durante el parto.
El VIH no se transmite por compartir agua o comida o por la picadura de un mosquito.
Enfermedades que pueden incrementar el riesgo de que te contagies de VIH:
Gonorrea.
Clamidia.
Sífilis.
Herpes genital.
Trichomoniasis.
Vaginosis bacteriana.
¿Cómo puedes evitar el contagio del VIH?
Ya que el contagio se produce a través de las relaciones sexuales, el compartir jeringuillas y de la madre al hijo, la protección contra el VIH se divide en tres grandes categorías.
Para prevenir el contagio sexual:
1. Utiliza siempre condones.
Tanto los preservativos femeninos como los masculinos pueden evitar el contagio de VIH.
2. Mantente fiel a tu pareja o ten pocos amantes.
El tener sólo una o pocas parejas puede reducir el riesgo de infección no sólo del VIH sino también de las demás ETS, lo cual a su vez reduce aún más el riesgo de que te contagies de VIH.
3. Circuncisión masculina.
Si eres un hombre puedes considerar la posibilidad de circuncidarte. La circuncisión masculina en un hospital o en una clínica reduce el riesgo de contagio de VIH a través de una mujer en un 50%. Por el contrario, la ablación femenina o mutilación o corte genital femenino no evita la infección de VIH.
4. Flujos anormales.
Si tienes flujos anormales, llagas o dolor al orinar, haz que te examine un médico. Estos síntomas indican que algo no está bien. Está demostrado que la clamidia, la gonorrea, la sífilis, el herpes genital, la trichomoniasis, y la vaginosis bacteriana incrementan el riesgo de contagio y propagación del VIH. Si tienes estos síntomas hazte un chequeo y avisa a tu pareja para que también se pueda hacer examinar y , en caso necesario, se ponga en tratamiento.
5. Hazte un análisis con tu pareja para saber si tienes VIH.
Cada vez que cambies de pareja y antes de tener relaciones sexuales sin protección, hazte un análisis. Puede que tú o tu pareja estéis infectados con el VIH y no lo sepáis.
Para evitar el contagio a través de la sangre:
1. Utiliza agujas esterilizadas.
Asegúrate de que cada vez que recibes una transfusión se utilizan agujas nuevas esterilizadas. Lo mismo es de aplicación si usas drogas o medicamentos inyectables: no compartas las agujas y usa una nueva cada vez que te inyectes. Ten esto en cuenta también para los piercing, los tatuajes o la acupuntura.
2. Asegúrate de que recibes sangre limpia cuando te pongas una transfusión de sangre.
Una transfusión de sangre puede transmitir VIH, sífilis y hepatitis
B. Es por ello que es de vital importancia que te cerciores de que la sangre que te ponen ha sido analizada previamente, sobretodo en países en los que el VIH es algo normal.
Para evitar el contagio de la madre al bebé:
1. Toma medicamentos antirretrovirales durante el embarazo y el parto.
Si eres seropositiva y estás embarazada puedes tomar medicamentos antirretrovirales durante el embarazo y el parto para evitar pasarle el VIH a tu bebé.
2. Cesárea.
Si tienes VIH y estás embarazada, considera la posibilidad de hacerte una cesárea ya que reduce el riesgo de que se lo transmitas al bebé.
3. Si es posible, evita dar el pecho.
La OMS (Organización Mundial de las Salud) recomienda que las madres seropositivas utilicen sustitutivos de la leche materna siempre que sea posible. No obstante, si vives en un sitio en el que no hay agua potable y no puedes hervirla cada día, puedes decidir no usar un sustitutivo de la leche materna. El riesgo de coger una enfermedad mortal por agua no potable es superior al riesgo de coger una infección de VIH por la leche materna. Debes consultar esta situación con tu médico.
¿Cuáles son los síntomas de VIH?
Los primeros síntomas de una infección de VIH se suelen ser similares a los de un resfriado o una gripe, por lo que la mayoría de la gente no se da cuenta de que están infectados.
Si sufres síntomas como fiebre, dolor de cabeza, sarpullido, diarrea y dolor de garganta de tres a seis semanas después de haber tenido relaciones sexuales sin protección, es recomendable que puede te hagas un análisis para ver si tienes una infección de VIH.
Estos síntomas desaparecen sin tratamiento. Sin embargo, si de verdad tienes VIH, la infección no desaparece. Bien al contrario, en los próximos ocho a diez años, la infección se habrá extendido silenciosamente por tu organismo destruyendo el sistema inmunitario. Entonces pasas a la fase terminal de la infección de VIH conocida como SIDA.
Fase terminal del VIH/SIDA
Normalmente, la enfermedad tarda entre 8 y 10 años en hacerse grave. Este es el tiempo que el virus necesita para destruir el sistema inmunitario hasta el punto de que el organismo ya no puede defenderse de ninguna infección.
Imagen: Sarcoma de Kaposi
Síntomas de la fase terminal de la infección de VIH/SIDA:
· Pérdida extrema de peso.
· Pérdida del apetito.
· Diarrea continua.
· Cáncer de piel.
· Meningitis.
La única manera de saber con seguridad si tienes VIH es hacerte un análisis.
¿En qué consisten los análisis para saber si tengo VIH?
Lo normal es que el personal sanitario te pida que esperes tres meses desde que tuviste relaciones sexuales sin protección, utilizaste una aguja no esterilizada o recibiste una transfusión de sangre sospechosa antes hacerte los análisis del VIH.
Si te quieres hacer un chequeo, el personal sanitario debe asesorarte tanto antes como después de hacerte los análisis.
Periodo de ventana o de manifestación del VIH
Los análisis miden la respuesta del sistema inmunitario a la infección de VIH. Comprueban si tu organismo ha producido o no anticuerpos contra el VIH. Que seas seropositivo significa que hay anticuerpos del VIH en la sangre.
Normalmente se tarda hasta dos meses en generar los anticuerpos del VIH. Para estar más seguros, los profesionales de la salud te aconsejan que esperes tres meses para hacerte el análisis (esto se llama también periodo de ventana).
Si te haces los análisis antes de los tres meses, puede que el resultado sea negativo y que sin embargo estés contagiado. A esto se le llama falso negativo.
Diferentes tipos de análisis para detectar el VIH
En función de dónde vivas, tienes acceso a distintos tipos de análisis para detectar el VIH: de sangre, de orina o bucal. El personal sanitario puede tomarte una muestra de sangre, de orina o de la saliva poniendo un bastoncillo de algodón en la boca.
Los análisis de orina son menos precisos que los de sangre o saliva para detectar el VIH.
¿Cuánto tardan los resultados?
El tiempo que tarda el resultado en estar listo depende del tipo de análisis que te hayas hecho. Por lo general, con un análisis rutinario, el resultado se entrega en unas dos semanas. No obstante, si has solicitado un análisis rápido, tendrás el resultado en una hora.
¿Cómo se cura el VIH?
El VIH no tiene cura y no hay vacunas posibles contra la enfermedad.
Una persona que tenga unos hábitos de vida saludables puede vivir sana y sin recibir ningún tratamiento durante unos diez años después de haber sido infectada.
Las medicinas que existen en la actualidad pueden alargar el periodo de tiempo en el que se está sano y sin síntomas de SIDA. Estos medicamentos se llaman antirretrovirales, ARVS o medicamentos antivirales del VIH. Su funcionamiento consiste en evitar que el virus se multiplique en el organismo.
Hay 34 millones de personas en todo el mundo que tienen VIH/SIDA. Es una ETS que destruye el sistema inmunitario. Con el tiempo, el VIH ha dañado tanto el sistema inmunitario que el organismo no es capaz de luchar contra otras infecciones. El SIDA se desarrolla solamente en las etapas finales de la infección de VIH.
Se dice que una persona es VIH positiva (VIH+), seropositiva o que vive con el VIH/SIDA cuando está infectada con el VIH.
El VIH es una enfermedad incurable. No obstante, existen tratamientos para frenar el progreso de la enfermedad y el desarrollo del SIDA.
Actualmente, una persona con VIH puede vivir hasta 20 años sin desarrollar el SIDA.
Imagen: el lazo rojo es un símbolo de solidaridad con la gente que tiene VIH y con los que viven con SIDA.
¿Cómo se contagia el VIH?
Se puede contagiar a través de fluidos corporales infectados tales como el líquido pre seminal, el semen, el flujo vaginal, la leche materna y la sangre.
El VIH se propaga a través de la práctica de actividades sexuales pero también no sexuales.
Entre las actividades sexuales se encuentran el tener relaciones sexuales vaginales, anales u orales sin protección. El sexo vaginal y el sexo anal conllevan mucho más riesgo de contagio que el sexo oral.
Entre las actividades no sexuales se encuentran el compartir agujas hipodérmicas no esterilizadas, recibir transfusiones de sangre contaminada y la lactancia. La madre, además, puede pasárselo al bebé durante el parto.
El VIH no se transmite por compartir agua o comida o por la picadura de un mosquito.
Enfermedades que pueden incrementar el riesgo de que te contagies de VIH:
Gonorrea.
Clamidia.
Sífilis.
Herpes genital.
Trichomoniasis.
Vaginosis bacteriana.
¿Cómo puedes evitar el contagio del VIH?
Ya que el contagio se produce a través de las relaciones sexuales, el compartir jeringuillas y de la madre al hijo, la protección contra el VIH se divide en tres grandes categorías.
Para prevenir el contagio sexual:
1. Utiliza siempre condones.
Tanto los preservativos femeninos como los masculinos pueden evitar el contagio de VIH.
2. Mantente fiel a tu pareja o ten pocos amantes.
El tener sólo una o pocas parejas puede reducir el riesgo de infección no sólo del VIH sino también de las demás ETS, lo cual a su vez reduce aún más el riesgo de que te contagies de VIH.
3. Circuncisión masculina.
Si eres un hombre puedes considerar la posibilidad de circuncidarte. La circuncisión masculina en un hospital o en una clínica reduce el riesgo de contagio de VIH a través de una mujer en un 50%. Por el contrario, la ablación femenina o mutilación o corte genital femenino no evita la infección de VIH.
4. Flujos anormales.
Si tienes flujos anormales, llagas o dolor al orinar, haz que te examine un médico. Estos síntomas indican que algo no está bien. Está demostrado que la clamidia, la gonorrea, la sífilis, el herpes genital, la trichomoniasis, y la vaginosis bacteriana incrementan el riesgo de contagio y propagación del VIH. Si tienes estos síntomas hazte un chequeo y avisa a tu pareja para que también se pueda hacer examinar y , en caso necesario, se ponga en tratamiento.
5. Hazte un análisis con tu pareja para saber si tienes VIH.
Cada vez que cambies de pareja y antes de tener relaciones sexuales sin protección, hazte un análisis. Puede que tú o tu pareja estéis infectados con el VIH y no lo sepáis.
Para evitar el contagio a través de la sangre:
1. Utiliza agujas esterilizadas.
Asegúrate de que cada vez que recibes una transfusión se utilizan agujas nuevas esterilizadas. Lo mismo es de aplicación si usas drogas o medicamentos inyectables: no compartas las agujas y usa una nueva cada vez que te inyectes. Ten esto en cuenta también para los piercing, los tatuajes o la acupuntura.
2. Asegúrate de que recibes sangre limpia cuando te pongas una transfusión de sangre.
Una transfusión de sangre puede transmitir VIH, sífilis y hepatitis
B. Es por ello que es de vital importancia que te cerciores de que la sangre que te ponen ha sido analizada previamente, sobretodo en países en los que el VIH es algo normal.
Para evitar el contagio de la madre al bebé:
1. Toma medicamentos antirretrovirales durante el embarazo y el parto.
Si eres seropositiva y estás embarazada puedes tomar medicamentos antirretrovirales durante el embarazo y el parto para evitar pasarle el VIH a tu bebé.
2. Cesárea.
Si tienes VIH y estás embarazada, considera la posibilidad de hacerte una cesárea ya que reduce el riesgo de que se lo transmitas al bebé.
3. Si es posible, evita dar el pecho.
La OMS (Organización Mundial de las Salud) recomienda que las madres seropositivas utilicen sustitutivos de la leche materna siempre que sea posible. No obstante, si vives en un sitio en el que no hay agua potable y no puedes hervirla cada día, puedes decidir no usar un sustitutivo de la leche materna. El riesgo de coger una enfermedad mortal por agua no potable es superior al riesgo de coger una infección de VIH por la leche materna. Debes consultar esta situación con tu médico.
¿Cuáles son los síntomas de VIH?
Los primeros síntomas de una infección de VIH se suelen ser similares a los de un resfriado o una gripe, por lo que la mayoría de la gente no se da cuenta de que están infectados.
Si sufres síntomas como fiebre, dolor de cabeza, sarpullido, diarrea y dolor de garganta de tres a seis semanas después de haber tenido relaciones sexuales sin protección, es recomendable que puede te hagas un análisis para ver si tienes una infección de VIH.
Estos síntomas desaparecen sin tratamiento. Sin embargo, si de verdad tienes VIH, la infección no desaparece. Bien al contrario, en los próximos ocho a diez años, la infección se habrá extendido silenciosamente por tu organismo destruyendo el sistema inmunitario. Entonces pasas a la fase terminal de la infección de VIH conocida como SIDA.
Fase terminal del VIH/SIDA
Normalmente, la enfermedad tarda entre 8 y 10 años en hacerse grave. Este es el tiempo que el virus necesita para destruir el sistema inmunitario hasta el punto de que el organismo ya no puede defenderse de ninguna infección.
Imagen: Sarcoma de Kaposi
Síntomas de la fase terminal de la infección de VIH/SIDA:
· Pérdida extrema de peso.
· Pérdida del apetito.
· Diarrea continua.
· Cáncer de piel.
· Meningitis.
La única manera de saber con seguridad si tienes VIH es hacerte un análisis.
¿En qué consisten los análisis para saber si tengo VIH?
Lo normal es que el personal sanitario te pida que esperes tres meses desde que tuviste relaciones sexuales sin protección, utilizaste una aguja no esterilizada o recibiste una transfusión de sangre sospechosa antes hacerte los análisis del VIH.
Si te quieres hacer un chequeo, el personal sanitario debe asesorarte tanto antes como después de hacerte los análisis.
Periodo de ventana o de manifestación del VIH
Los análisis miden la respuesta del sistema inmunitario a la infección de VIH. Comprueban si tu organismo ha producido o no anticuerpos contra el VIH. Que seas seropositivo significa que hay anticuerpos del VIH en la sangre.
Normalmente se tarda hasta dos meses en generar los anticuerpos del VIH. Para estar más seguros, los profesionales de la salud te aconsejan que esperes tres meses para hacerte el análisis (esto se llama también periodo de ventana).
Si te haces los análisis antes de los tres meses, puede que el resultado sea negativo y que sin embargo estés contagiado. A esto se le llama falso negativo.
Diferentes tipos de análisis para detectar el VIH
En función de dónde vivas, tienes acceso a distintos tipos de análisis para detectar el VIH: de sangre, de orina o bucal. El personal sanitario puede tomarte una muestra de sangre, de orina o de la saliva poniendo un bastoncillo de algodón en la boca.
Los análisis de orina son menos precisos que los de sangre o saliva para detectar el VIH.
¿Cuánto tardan los resultados?
El tiempo que tarda el resultado en estar listo depende del tipo de análisis que te hayas hecho. Por lo general, con un análisis rutinario, el resultado se entrega en unas dos semanas. No obstante, si has solicitado un análisis rápido, tendrás el resultado en una hora.
¿Cómo se cura el VIH?
El VIH no tiene cura y no hay vacunas posibles contra la enfermedad.
Una persona que tenga unos hábitos de vida saludables puede vivir sana y sin recibir ningún tratamiento durante unos diez años después de haber sido infectada.
Las medicinas que existen en la actualidad pueden alargar el periodo de tiempo en el que se está sano y sin síntomas de SIDA. Estos medicamentos se llaman antirretrovirales, ARVS o medicamentos antivirales del VIH. Su funcionamiento consiste en evitar que el virus se multiplique en el organismo.
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